Patricia Volpe se confiesa mussista.
Por Claudio Pastorini
Fruto del amor en aquellos pagos del partido bonaerense de General Bolívar, entre Juan Carlos (foto) y Neli Vicente, llegó al mundo un 25 de Mayo la pequeña Mónica Patricia Volpe, quien junto a los suyos, adoptó desde entonces a Villa España como su lugar en el mundo.
Estudió en el Instituto Santa Cecilia y el General San Martín (en la 14), para seguir su vocación de peluquera profesional, cuidadora de adultos mayores y especializarse luego en las difíciles cuestiones de violencia de género.
“Si no pasas por ello (violencia de género), no será fácil entender a las víctimas, pues el llamado al 911 no alcanza para poder contener luego de mal pasar por esas situaciones”
Madre de ocho hijos y abuela compinche de 18 nietos, sigue considerando que su curiosidad puede llevarla a meter la pata… pero prefiere llegar a equivocarse y aprender de ese error, a quedarse con la duda y permanecer indiferente.
Desde su Consultora participó como conexión con empresas a fin de generar empleos. Luego, fue convocada por dirigentes y funcionarios como Julio Pochi Ravelo, Enrique Sbuscio, Omar Ovando, el Dr. Eduardo Podestá, el Dr. Albanese para hacer tareas dentro de los Centros Perifericos. El pastor Walter Di Nucci, como Omar Avellaneda aportaron en su labor con personas adictas en el tratamiento pos-drogas.
Lleva a cabo su trabajo social desde Mujeres de Pie y, a la vez, desde la Secretaría General de la ONG Juntos Hacemos Más, radicada en 33 A y 149, con sus cursos y talleres orientativos.
Confiesa, «me veo como mussista, porque de verdad admiro la gestión del Doctor», aunque también acepta que es peronista desde su cuna.
En un momento, intentó abrir un local partidario, pero por problemas de salud de su madre que no pudieron solucionarse y que la llevaron al descanso, dio por tierra con ese proyecto, aunque desde siempre pretende lograr un espacio desde donde ayudar a la gente, “como siempre lo hice”.
Sueña con representar a los vecinos, como ellos lo merecen, porque a los concejales en su mayoría le falta el contacto directo con la gente, cuando ésta lo necesita.
Pone a disposición su teléfono 1128738861, aspira a ser concejal del pueblo en alguna oportunidad, en lugar de pensar en proyectos faraónicos, su función será la de estar y escuchar siempre a la gente, para dar respuestas.
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