MORENO Y VALDEZ: BRINDIS EN EL SOIVA

Foto: Maradona con Moreno, foto colgada en la carpa del acto de hoy.

Guillermo Moreno y Horacio Valdez despidieron el año en el complejo recreativo Cristal, de Ranelagh.

La fecha había sido elegida mucho antes de saber que este 20 de diciembre iba a tener un asueto arrancado por el pueblo para recibir con festejo al seleccionado de fútbol campeón mundial. Así, la llegada de referentes de distritos lejanos se vio dificultada aunque no tanto porque asistieron dirigentes de La Plata (Cristina Moreno), CABA (Nydia Lirola), la primera sección (Alberto Visconti), la fiel Pimpi Colombo y hasta un empresario de Bahía Blanca.

El ex secretario de Comercio Interior y reciente candidato a diputado acompañó al secretario nacional del Sindicato de Obreros del Vidrio en un acto que fue a la vez despedida del 2022 y preanuncio de la campaña por venir.

Es que en la carpa que usara Diego Maradona en Italia (Moreno la hizo traer desde allá en su momento) la cúpula de Principios y Valores dio impulso al nuevo debate: qué modelo económico es posible para la Argentina que viene. Allí repartieron el Plan Económico Peronista, con 48 páginas a color.

Lectores de Berazategui ya conocen la impronta que Valdez imprime a sus discursos, con fuerte contenido de peronismo clásico, reivindicativo de que «los días más felices del pueblo fueron los días peronistas», que ubica las críticas a los sindicalistas en un contexto de lucha contra los empresarios que no quieren reconocer el esfuerzo de sus obreros.

En cambio, Moreno divulga datos para entender la economía a partir de preceptos sencillos, como el ejemplo del vaso en que bebía jugo: «Si este vaso no es fabricado acá, los empleados de Comercio deberán vender los que vengan de China». Lo planteaba con palabras de Ruben Ledesma, el sindicalista mercantil de La Matanza que no pudo llegar debido a la enorme concentración que movilizó a millones en el conurbano.

«Ese es el ‘aluvión zoológico’ -deslizó Moreno con ironía- ahí estaban movilizados nuestros muchachos», mantuvo en referencia a los pobres, los desclasados, los que laburan siempre que tengan empleo. A esa clase social le resuena como ‘traición’ lo que hace Alberto Fernández en contra de lo que se esperaba de un oligarca como Mauricio Macri. Moreno tilda cada dos por tres de ‘socialdemócrata’ a Fernández y vislumbra que el retiro de Cristina K por imposición de un fallo judicial es una oportunidad para un candidato peronista de verdad.

Nadie planteó hoy que Moreno fuese candidato a presidente, pero Valdez lo sugirió con frases subordinadas a alguna humorada. En cambio, el potencial postulante dejó la puerta abierta a «algún compañero» que quiera sumarse al proyecto, lo que también puede leerse como su adhesión a otro presidenciable siempre que la plataforma sea peronista, en el sentido más cercano al apoyo a un modelo productivo.

Además de las constantes referencias a la alegría futbolística, todos mantuvieron una coherencia discursiva que entiende «la Patria» como el «patrimonio común» y sostuvieron los principios de ‘conciliación de clase’ (planteados en La Razón de mi Vida, de Evita) por los que el trabajo y el capital deben convivir en un proyecto común de beneficio mancomunado para el pueblo.

Otra variable que se repitió en los discursos fue el de los valores cristianos, tanto porque es herencia del peronismo clásico (una doctrina humanista) como por el alineamiento con el Papa Francisco que comparte una militancia común desde hace medio siglo. Ese componente, en un partido que se llama Principios y Valores, sirvió para darle un cierre a la velada, en la que se brindó con sidra y pan dulce a pocos días de la Navidad, por la que todos levantaron sus copas.

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