TOMA DE TIERRAS; DESALOJO COMPULSIVO Y ACAMPE

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(Por Tony del Greco; La Izquierda Diario y otros medios)

En Dardo Rocha y 3, dos centenares de familias tomaron un predio junto al Mercado Frutihortícola el viernes 31 de mayo, según informó en primicia el periodista Tony Del Greco, a las 18:13.

Según el colega del diario El Sol, “fueron desalojadas en forma compulsiva y hubo detenidos”. En su detallado relato para su cuenta de Facebook, la situación se generó cuando numerosos moradores ingresaron al predio contiguo al Mercado Mayorista Frutihortícola Productores del Sud con elementos de demarcación (hilos, nylon, cubiertas, palos) para fraccionarlo y dividirlo. Esta actitud fue denunciada por el propietario de la tierra –que había logrado luego de varios años de litigio un fallo a favor del Poder Judicial que le restituyó el predio luego de otra añeja usurpación–.

Tras la denuncia en la Comisaría 1ª, se apersonó personal policial para solicitarle a los ocupantes que desalojen el lugar, dado que era propiedad privada, no obstante éstos pidieron hablar con el propietario para proponer comprarle el terreno usurpado mediante un “plan de pagos” a cambio de que los dejaran quedarse en la tierra tomada. La mediación de la Policía no tuvo eco favorable, por lo que se dio intervención a la Fiscalía de turno, que ordenó el desalojo compulsivo.

Hubo un nuevo intento de negociación para que la gente depusiera su actitud, dada la presencia de mujeres y niños, pero los ocupantes decidieron quedarse y comenzaron a volar pedradas contra la Policía. Personal femenino de la fuerza de seguridad detuvo a tres mujeres que se habían sentado en el terreno para impedir el avance de la Infantería, lo que motivó la reacción de los manifestantes y comenzaron los disparos al aire. Se produjo una estampida y en medio de pedradas contra la Policía los ocupantes comenzaron a correr y a abandonar el predio. En el lugar, luego de los disturbios reinaba una tensa calma, y personal policial quedó de consigna para evitar una nueva ocupación, según informó Del Greco.

Otros relatos

El periodista deportivo Sergio Goberna, quien conoce la zona,  aportó: “La gente, el pueblo, la sociedad va por esas tierras públicas que el barrio se encargó de pelear a través de muchos años (por lo menos cerca de 31/32 años). Tienen y hubo pruebas que les perteneció al conjunto del barrio, y que el Mercado, con el aval del municipio y la Secretaría de Entidades de Bien Público (Marcelo Benedetti) a cargo de un cobarde que siempre estuvo ahí con el gobierno de turno, fraguando documentos provinciales. Esos papeles los presentaron los vecinos que pelearon y que hoy, a través del amiguismo del Poder Judicial, tuvieron que entregar a los amigos del poder económico. Los que andan y anduvieron por la Sociedad de Fomento, saben de qué hablo y que pasó. En el mientras tanto, los vecinos perdieron un lugar de esparcimiento familiar, deportivo y de higiene y cuidado social”.

Nuevos

Tras la difusión del caso por los portales El Progreso y AOL, desde el domingo, se acercaron más familias. Durante la madrugada del lunes los vecinos cortaron la Avenida Rocha y la Policía otra vez los amedrentó.

Ese lunes 3 de junio ya era noticia en medios porteños con pretensión de nacionales como La Izquierda Diario, quien dio cuenta de que “Doscientas familias acampan en Berazategui tras desalojo”.

Permanecían allí desde el viernes, cuando fueron desalojados por la policía del predio en el cual se habían instalado, en un violento operativo. Aseguraron que no se irían hasta que el municipio les diese una respuesta.

En esos barrios, San José y San Mauro, pedían al municipio que les otorgase un terreno para construir viviendas.

Los vecinos y vecinas que permanecen en el acampe afirman que solo quieren un terreno para sus familias. Ingresaron el viernes al mediodía; alrededor de las 16.30 se presentó la Policía de manera provocadora anunciando que la Fiscalía había dado la orden de desalojarlos. Las familias pidieron que les mostrase la orden pero se negaron. Iniciaron el operativo de desalojo que contó con gases lacrimógenos, balas de goma y balas de plomo. Los efectivos avanzaron hacia el centro del predio, donde los encerraron y con ayuda de policías de civil retuvieron a más de veinte personas –entre ellos de una menor que pasó 24 horas detenida– y nueve heridos –una nena debió ser internada por la inhalación de gas lacrimógeno–. Quedaron quince detenidos incomunicados.

Elizabeth, de 23 años explicó: “Nadie vino a preguntar porqué estábamos acá; la mayoría somos familias, necesitamos de verdad. Nadie está pidiendo que nos regalen nada, que nos den una chequera y lo pagamos, que nos den una facilidad”.

La situación de las 200 familias que acampan se da en el marco del drama social que afecta a miles de personas en todo el país; según un relevamiento de 2016 por parte de la ONG Techo “existen 1.834 asentamientos en el 70% del territorio argentino, donde viven 532.000 familias”.

La concentración de la tierra

El colega Alberto Moya preguntaba en las redes: ¿Saben porqué se llamaba Pereyra Iraola el parque más grande de la ciudad? Porque esa familia fue una de las que financió las campañas «al desierto» que exterminaron a los indios para robarles las tierras. En esa historia está el origen de la expropiación que Perón hizo cuando pasó a llamarlo Parque los Derechos de la Ancianidad, hasta que las dictaduras le devolvieron el nombre de los ladrones originarios. Del total de lo robado por los ricos, ocho millones y medio de hectáreas, podrían lotearse cuarenta terrenos por hectárea (una manzana) lo que alcanzaría para darle su lote a cada nacido en la Argentina. No se hace porque el 80% de la tierra cultivable en la Argentina está en manos de sólo 5 familias.