«De los ocho guardavidas, habían echado a seis y los otros dos tenían Covid”, señaló un familiar.
Este martes 11 encontraron sin vida a Valentín de María de 48 años, quien el sábado por la tarde practicaba kitesurf cuando cayó al río de Hudson.
El deportista fue encontrado por los bomberos en las cercanías al arroyo Baldovino, en el límite con Ensenada, donde también trabajaba la Prefectura Naval Argentina, Defensa Civil y la Policía bonaerense.
Según fuentes policiales, sus restos serán trasladados a la morgue donde se le realizará una autopsia para esclarecer qué causó su fallecimiento.
Además, detallaron que la víctima, que se había extraviado a unos mil metros de la costa, fue hallado a tres kilómetros del lugar donde había sido visto por última vez.
Se desconoce si encontraron su equipo: la tabla y la “cometa de tracción”, que tiene forma de paracaídas.
El dato de que haya aparecido a tantos metros del lugar de su desaparición abre varias hipótesis de lo que pudo haber causado su muerte.
Investiga la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N° 5 de Berazategui, a cargo de Laureano Carlos Riera.
El caso
Valentín de María desapareció el sábado, cuando había asistido a la Escuela de Kite “Peregrino” ubicada en un camping a la altura de Hudson. Allí lo había acompañado un grupo de amigos y su novia.
Según los testigos, la última vez que lo vieron fue cuando ingresó al agua con su tabla pasado el mediodía. Unos minutos después, se lo vio tener una caída. Cuando una persona que pasaba con una moto de agua quiso socorrerlo, la corriente se lo llevó.
Desde entonces, comenzó una intensa búsqueda en la que participó la Prefectura, Defensa Civil, buzos tácticos y perros entrenados que realizaban un trabajo a contrarreloj tanto por agua como por tierra y aire para encontrarlo.
Valentín de María realizaba esta actividad desde hacía dos décadas, contaron sus allegados. Sin embargo, esta vez no había utilizado su equipo: el suyo estaba guardado en el auto y un compañero le insistió para que entrara con otro que no contaba con chaleco salvavidas.
“No tenemos idea de qué pasó. El Río de la Plata es un charco, no es tan profundo. La verdad que no hay muchas esperanzas”, había dicho Alejandro Cao, su cuñado, en TN.
Apuntó contra la organización del lugar: “Ayer tendría que haber habido guardavidas y no había. De los ocho, nos dijeron que echaron a seis y los otros dos tenían Covid”, señaló.
Si bien es lamentable que no haya guardavidas cada uno tiene la opcion de entrar o no al agua y a su vez debe usar chaleco y todas las medidas de seguridad. Hay que hacerse cargo de los errores propios también.