Edesur detectó y denunció conexiones clandestinas en el barrio cerrado de Plátanos.
En el kilómetro 31,500 de la Autopista, constataron que 41 viviendas no tenían medidores: 13 eran casas terminadas y 28 obras en construcción.
Los técnicos cortaron las conexiones clandestinas y retiraron los cables de la anomalía.
Un escribano público labró actas.
El hurto o robo de energía está contemplado en el Código Penal.
Los ladrones de guantes blanco deberán ir a Edesur para solicitar el medidor.
Cuando alguien no preparado manipula la red puede sufrir daños para sí, para terceros y generar daños en la vivienda de sus vecinos, al generar altibajos en la tensión. Las conexiones clandestinas también afectaron la calidad del servicio de los clientes de la zona, informó Edesur al dar a conocer este caso.
