Acto en Avellaneda, este jueves 20 de octubre, al cumplirse 12 años del asesinato de Mariano Ferreyra.
Por Política Obrera-Partido Obrero (Tendencia)
Mariano Ferreyra fue asesinado por una patota del sindicato Unión Ferroviaria dirigida por José Pedraza, cuando se encontraba apoyando una movilización de trabajadores ferroviarios tercerizados en lucha por su reincorporación y pase a planta permanente en el FFCC Roca.
La patota de la UF, contaba con elementos de las barras bravas de equipos de fútbol de la zona sur del conurbano.
La agresión patoteril a los trabajadores, tenía como principal razón, defender los negociados de la burocracia sindical de la Unión Ferroviaria, a través de las empresas tercerizadas, de las cuales Pedraza y otros sindicalistas y familiares de ellos, eran dueños o socios.
La acción de la patota fue garantizada por la acción de la Policía Federal y de la Bonaerense, que liberaron la zona a uno y otro lado del Riachuelo, acción que fue elogiada por el actual ministro «de seguridad» Aníbal Fernández.
Una enorme lucha popular permitió que los autores materiales del asesinato, los que dispararon las armas de fuego, y parte de los autores intelectuales, los jefes del sindicato que dieron la orden e instigaron la acción criminal, hayan sido condenados y llevados a la cárcel. Un hecho histórico para los trabajadores.
A pesar de ello, las bases de la dominación burocrática en el sindicato y sus negociados, donde se entrelazan el empresariado y el Estado, siguen firmes. Esa sociedad es también la que produjo la masacre de Once, con decenas de muertos.
Hoy, la lucha contra la tercerización laboral y la precarización están más vigentes que nunca, con el 60% de los trabajadores bajo la línea de la pobreza.
Llamamos a los trabajadores a participar del acto en memoria de Mariano Ferreyra y su lucha, van a estar haciendo uso de la palabra diferentes sectores de trabajadores en lucha, comisiones internas y delegados. Cierra el acto el compañero Jorge Altamira.
Tenemos la tarea de organizar un gran Congreso Obrero para sacarnos de encima a la burocracia sindical, y así poder organizar la Huelga General, por todas las reivindicaciones pendientes, contra el ajuste del FMI, el gobierno y la oposición patronal de la falsa «grieta».
