Foto: Tanques de agua que Fava distribuyó porlos barrios durante el verano, cuando no era candidato.
Por Walter Fava
Un reclamo que persiste en esta gestión diluida es la falta de acceso al agua potable. Aunque en todas las ciudades del mundo es posible obtener este elemento vital abriendo una canilla, en Berazategui esto ha sido un problema de décadas que parece no encontrar solución.
La clave para abordar este desafío radica, como se ha mencionado en varias publicaciones, en la voluntad política de querer resolverlo. Entre los numerosos proyectos destinados a mejorar la calidad de vida en Berazategui, uno de los más importantes es trabajar en colaboración con ONGs y empresas especializadas para devolver a los vecinos y vecinas la dignidad de acceder a agua potable y segura en su vida diaria.
La escasez de agua es un tema delicado y urgente que no puede seguir pasando desapercibido. Los residentes merecen contar con un suministro confiable de agua, esencial para su salud y bienestar. La falta de acceso a agua potable no solo afecta la calidad de vida de los ciudadanos, sino que también impacta negativamente en la salud pública y el desarrollo de la comunidad.
El acceso a agua potable y segura no solo es un derecho humano fundamental, sino que también es un elemento clave para el desarrollo social y económico de la ciudad. Garantizar un suministro confiable de agua permitirá mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, atraer inversiones y promover el crecimiento sostenible de Berazategui.
