Romina Del Plá (candidata a vicepresidenta) señaló que en su visita por Quilmes estuvo en el acampe de la papelera ANSABO.
En el acto donde concurrieron 8000 personas, hablaron los compañeros Gabriel Solano (candidato a jefe de gobierno), María Demateis (delegada de Textilana), Fernando Ramal (presidente de la FUBA), Néstor Pitrola (candidato a diputado nacional), Christian Paletti (delegado del subte), Gabriela De la Rosa (dirigente de la juventud del Polo Obrero) y Romina Del Plá, a cargo del cierre. En forma simultánea hubo otros actos en el interior del país (en Córdoba con 1300 compañeros y en Neuquén con 300). Un día antes había tenido lugar un importante acto con 350 compañeros en Tucumán.
Representantes del movimiento obrero, estudiantil y de la mujer y candidatos y candidatas subieron al escenario, al igual que referentes de otras corrientes del FIT-U (Claudio Dellecarbonara, Christian Castillo y Myriam Bregman del PTS; María del Carmen Verdú de Poder Popular; Juan Carlos Giordano de Izquierda Socialista; Vilma Ripoll del MST). También se leyó una carta enviada desde el penal de Marcos Paz por Daniel Ruiz, militante del PSTU detenido por luchar contra la reforma previsional, que es candidato del FIT-U en Chubut.
Del Plá repasó el vínculo con las luchas a lo largo de sus actividades de campaña, por ejemplo con los obreros de Tecnomyl en Río Grande, una petroquímica fueguina que lleva un mes de acampe y paro bajo temperaturas bajo cero. También señaló que en su visita por Quilmes estuvo en el acampe de la papelera ANSABO donde presentó un proyecto reclamando el pago total de la deuda salarial y la continuidad laboral.
Llamó a apoyar esas luchas y superar el aislamiento que les impone la burocracia sindical. Saludó la gran huelga que llevan adelante los docentes salteños. Planteó la necesidad de un paro activo de 36 horas y un plan de lucha para derrotar la reforma previsional y laboral, y dijo que esos planteos son los que levanta el FIT-U en la campaña electoral, buscando evitar que los trabajadores voten por los partidos del ajuste.
“Luchamos para que haya un Cordobazo nacional que ponga en pie a la clase obrera ocupada y desocupada y a la juventud”.
Descartó que exista una contradicción entre la campaña electoral y la lucha revolucionaria, poniendo de relieve el trabajo parlamentario desarrollado por los legisladores y legisladoras del PO a lo largo del país.
“Estamos haciendo un trabajo de demolición implacable de las ilusiones democráticas en el parlamento”.
Señaló que es un terreno de confrontación con los referentes políticos de la clase capitalista, pero que no se restringe a la acción en el mismo parlamento, sino que se vincula también con las luchas populares.
Romina denunció los intentos de polarización patronal en la campaña y la bolsonarización de la campaña del oficialismo (“Servicio Cívico”). Destacó el problema que significa que muchos trabajadores piensen en votar al peronismo para sacarse de encima a Macri. Llamó, en tal sentido, a desenmascarar a la dupla F-F y conquistar esos votos para el FIT-U.
“Si no enfrentamos al régimen del FMI no vamos a tener otra salida que el ajuste”.
Planteó la necesidad de poner en pie comités de apoyo al FIT-U.
“El voto al FIT-U será una señal de reagrupamiento y una señal a las fuerza capitalistas de que no les será tan fácil avanzar con la reforma laboral y todas las reformas antiobreras”.