Como el mussismo sigue sin mostrar en qué gastan los dineros pagados por el pueblo, la oposición insiste en su exigencia para que el Poder Judicial actúe al respecto. Ese es el origen de la más reciente medida de la jueza Julia Andrea Rutigliano.
Después de muchos años en que el mussismo que gobierna Berazategui desde 1987 (36 años) ocultara las cajas con los comprobantes de gastos, esta vez alguien le puso coto: Fue el concejal Juan Cáceres (ARI-CC) quien, con el patrocinio de la abogada Sandra Massimino (ahora candidata a concejal por Juntos, en la lista de Dante Morini).
Su pedido ante sede judicial halló eco. Luego, el oficialismo local buscó alternativas que no implicaran darle a la oposición las claves del sistema RAFAM que les permitiría controlar las Cuentas. Consiguieron que una instancia judicial superior diera por terminada la medida cautelar pero ahora, una jueza respondió a favor de la comunidad.
Si bien la primera resolución de la cautelar permitió la sesión para discutir el Presupuesto 2022 en el Concejo Deliberante de Berazategui, el Juzgado ha resuelto dar lugar a los amparistas, quienes solicitaron que se ordenase al Honorable Tribunal de Cuentas de la Provincia que se exprese:
… que se manifieste de acuerdo a la resolución 0015/16 la cual modifica la resolución 449/11 en su artículo 2, si el Municipio debe designar a los concejales sus usuarios y contraseñas, con el objeto de dar lectura y consulta al sistema RAFAM.
Jueza Julia Andrea Rutigliano
Esta decisión representa un paso significativo en el proceso legal en curso. El Juzgado en lo Correccional 3 continuará con la supervisión del caso, mientras esperan que el Honorable Tribunal de Cuentas emita su opinión.