Los van de Lagemaat
El 24 de enero de 1903, en el frío enero de los Países Bajos, en la actual ciudad de Mijdrecht, provincia de Utrecht, nacía Nicolás van de Lagemaat. Sus padres eran Gilberto y Gertrudis Verbrugge.
Una de sus hijas me comentó: Nicolás quería ser mecánico, pero en esos años en Holanda o Nederland, el hijo del campesino era campesino, no podía progresar, así que decidió venir a América. Le dijo a su novia, Petronella Verburg, que trabajaría y vendría a buscarla para casarse.
Sin saber una palabra castellana, viajó a Argentina. Viajó en el Barco Zeelandia, había partido del Puerto de Amsterdam, a 19 km de su pueblo. Llegó al puerto de Buenos Aires el 30 de enero de 1925, recién cumplidos sus 22 años. Indicó que era soltero y mecánico.
En el Puerto, lo encontraron algunos paisanos de la iglesia Reformada Holandesa que se acercaban a los barcos para ayudar a los recién llegados. Le comentaron que en la Maltería de Conchitas (GE Hudson a partir de 1930) necesitaban trabajadores mecánicos.
Tomó el tren en Plaza Constitución, en aquellas épocas eran locomotoras a vapor, llamadas “vaporeras”, suponemos que en asientos de segunda clase, que eran más baratos.
Se bajó en la estación y la Maltería estaba muy cerca. Habló con un supervisor de origen alemán, y se entendieron bien. Comenzó a trabajar en la Primera Maltería Argentina de la familia Bemberg.
Encontramos en los archivos de viajes que el 12 de agosto de 1927 entraba de nuevo a Buenos Aires, desde el Puerto de Amsterdam, en el barco Orania. Lo acompañaba Petronella. Ambos dijeron tener 24 años.
Vivieron en la futura calle 158, de Plátanos, el terreno tenía un aljibe y llegaron los hijos, cinco mujeres y un varón. Nelly, Christina, Ian, Geri, Beatriz y María Juana (Popi). Los hijos concurrieron a la Escuela 2 de Hudson, en ese momento era la Escuela 5 de Quilmes.
El matrimonio de Nicolaas van de Lagemaat con Petronela Verburg (tiene la cadena del aljibe), con su hija mayor en brazos, Nelly, de seis meses. También tante (tía) Juana y Jan Mul, con Jany, casi de la misma edad de Nelly.
Con los años, conoció a un hijo de holandeses, nacido en Tres Arroyos en 1925, era “Cor” Waterdrinker.
Años después, inauguraron el taller metalúrgico LAWA (Lagemaat-Waterdrinker) en 158 y 47, Plátanos. Allí trabajaron muchos miembros de las familias mencionadas y vecinos del barrio. Fueron contratistas metalmecánicos en muchas obras para Maltería Hudson. En este taller se realizaron los primeros cultos de la Iglesia Reformada Holandesa, de la cual Cor y Nicolás eran fervientes feligreses. El taller fue construido por Ian Millenaar, según me comentaron.
Terminamos estas pinceladas de un inmigrante, que como muchos llegó a nuestro país, y comenzó a construir un futuro para su familia y su nuevo país.
Nicolás falleció el 24 de noviembre de 1974, en Berazategui.