En la Unión Cívica Radical bonaerense hay dos líneas.
- Por un lado, el ex vicegobernador Daniel Salvador, que apuesta a mantener a la UCr en Cambiemos o Juntos Por el Cambio.
- Enfrente, Gustavo Posse, pretende romper con esa alianza para recuperar el partido, dicen.
¿Cómo se alinean en Berazategui?
- Con Salvador, juegan el ex presidente del Comité Jorge Naddaf; la concejal Nancy Vivas y el consejero Gustavo González.
- Enfrente, otro ex presidente de Comité, Carlos Abrami, su pareja la concejal Flavia Torrisi, y el jefe de campaña Ricardo ‘Hermiñito’ Carbajal.
Carbajal, una buena persona que sufrió como pocos el atropello mussista, es un reciente aliado de Abrami porque cree de verdad que hay que recuperar el partido. En su Movilización Radical tienen la genuina convicción de que hay que desprenderse del lastre de Cambiemos. Por eso, está ofendido por el suelto publicado en el periódico La Misión, de Ranelagh:
«Esta semana, se conocerá que Carlos Abrami fue ñoqui en la Legislatura, a sueldo del supuesto adversario K, peor que Ricardito Alfonsín, porque lo mantuvo oculto. Para ampararse, pretenderá encaramarse en la presidencia del Comité de Distrito de la UCr en inminentes internas. Pero varios se oponen. Primero, por su lastre: hasta los peronistas lo llamaron “coimero” en un comunicado del 20 de abril. Segundo, porque no quieren elecciones en pandemia.
La Misión, pp 4. Resumen de agosto 2020.
Desde Ranelagh, la primera voz en contrario fue la del consejero Gustavo González, quien planteó que no es sano pedirle a las directoras que abran las escuelas. Pero desde otras líneas tampoco quieren participar en el dislate que Abrami propicia.
“No estoy de acuerdo con internas en este momento”, respondió Liliana Martínez, viuda de Jorge Moyas.
“Estoy en la tribuna mirando como cuatro locos no se ponen de acuerdo. Vergüenza ajena tengo”, contestó Mario Raitman. Tampoco participará Daniel Martínez.
En efecto, Martínez –ex presidente del Comité– le dijo a este CIB: «Mis ocupaciones personales no me dan tiempo para ocuparme estos meses de la interna«.
Tampoco Roberto ‘Bocha’ Gómez armaría lista. «Estoy más cerca de apoyar a Gustavo» (González), dijo a este CIB el concejal (mc), también ex presidente del Distrito.
Más allá de los enojos de esta etapa contra la prensa independiente (sobre todo, independiente de la UCr local, que nunca colabora en nada y no tiene ni el gesto de enviar un saludo para el día del periodista), hay que señalar que las pujas y denuncias vienen de adentro de la Unión Cívica radical.
El caso de Raitman es el más llamativo. Ya desde 2018 venía diciendo que Abrami debía presidir otra vez el partido y que contaría con su apoyo. En esa sociedad política, entró a trabajar al Concejo Deliberante como secretario asesor de la edil Torrisi. Pero como «ella se corta sola y decide por su cuenta» –según el trascendido– el ‘Ruso’ Raitman decidió continuar con su vida fuera de un ámbito que nunca necesitó. Y se mantuvo en ésa, aún cuando le ofrecieron ser apoderado de lista.
La ruptura se dio en agosto, casi contemporánea a los días en que Abrami sufriera un fuerte infarto, del que se recuperó.
Análisis
Si la mayoría de los dirigentes de Berazategui no quieren exponer a sus afiliados a salir de a votar en pandemia, ¿cómo se resolvería?
Algunos ya han propuesto: «lista de unidad».
¿Pero unidad detrás de quién?
Si es detrás de Abrami, quedará claro el juego del PJ:
- Dejará a la UCR expuesta como caparazón protectora del «coimero».
- Beneficiará al oficialismo con la división de Juntos por el Cambio, que es lo único que le permitió al centenario partido resurgir de sus derrotas y posicionarse con gobernaciones y bancas legislativas que en Berazategui no tenían desde principios de siglo.
- Dejará entrever por qué el kirchnerismo le pagaba un sueldo a Abrami.
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