LA VISITA DEL BAILARIN FACUNDO MAZZEI

Compartir

Por Julio Duarte

Martes 18 hs. La tarde va tocando a su fin en Berazategui. La vereda de reconocido local de prendas unisex en 147 casi 14 comienza a colmarse de señoras, primero, y jóvenes después…
Veo el movimiento justo cuando iba a cruzar la calle y decido continuar la recta para «chusmear un poquito» (como decía mi tía Chola…)
Un llamativo joven despide a una bonita muchacha quien sube a un auto y se marcha (luego supe que era Flor Vigna) mientras era abordado por cazadoras de autógrafos, selfies y videos.
Al acercarme lo reconocí… En 5 segundos recorrí el tiempo y me ubiqué 25 años atrás…Un pequeño, muy pequeño, bailaba danzas folclóricas dirigido por su madre, Amanda, profesora en la Municipalidad de Quilmes.
Hijo de Marcelo, un cantor y bailarín de malambo, quien a su vez legó un apellido ilustre, el de Don Armando Mazzei, co-fundador del Centro Tradicionalista El Rodeo de Bernal.
A ese niño de Villa Alcira lo vimos crecer y esforzarse; crecer recorriendo grandes escenarios; crecer siempre con una sonrisa.
A tal punto creció que logró ingresar al VideoMatch de Marcelo Tinelli y conformar ese grupo selecto del staff de «Extravaganze», donde pronto se convirtió en el primer bailarín de la mano de Flavio Mendoza.
Hoy prueba la miel del éxito, por su calidad, su capacidad y su profesionalidad.
Imagino que lo único que lamentará es haber llegado a la cima y no poder disfrutarlo más tiempo con su madre querida, quien partió antes, joven, después de haber dado todo por él.
De repente me encontré con su mirada, sorprendido, se me acercó, sonrió a lo ancho y nos abrazamos.
Sentí que aquel niño sigue siendo ese tierno querubín, querible, sociable, trabajador.
Facundo Mazzei, un gran artista, siempre amable, trabaja y mientras cambia por enésima vez su indumentaria, continúa sonriendo y saludando al público, su público, que se acerca a él y se contagia de su ternura.
El arte personalizado pasó por Berazategui y dejó estas ganas irresistibles de contarles a ustedes que en tiempo de escasez de valores, da mucho gusto compartir momentos con buena gente como él.
Facundo Mazzei, un ser de luz… Un orgullo de barrio.