MANIPULARON UNA AUDIENCIA POR LA AUTOPISTA

Compartir

Durante días 21, 23 y 24 de septiembre se llevó a cabo la Audiencia Pública sobre la prolongación de la Autopista Buenos Aires – La Plata (Balbín) hasta el empalme con la Ruta Provincial 11.

Se presentó para su aprobación una obra de impacto negativo sobre el Parque Martín Rodriguez, de Ensenada, sobre los humedales Maldonado, de Berisso, y sobre toda la región ribereña del Río de la Plata, incluidas las islas Paulino y Santiago y el delta del río Santiago.

Se presentó el estudio de Impacto Ambiental, las características de la obra y su marco normativo. Si bien el objeto de Audiencia era “Conocer la opinión de los ciudadanos y asociaciones intermedias sobre el proyecto”, el primer elemento que resalta el desarrollo es el hecho de que de los 87 oradores (sin contar quienes presentaron el proyecto) el 42,5% fueron funcionarios municipales (hablaron casi todos los concejales) y el 6,9% eran empresarios ligados a los municipios, con intereses directo en este tipo de obra. Es decir, que la supuesta mayoría que habría hablado a favor de la obra, según deslizó el presidente de la Audiencia, respondía a intereses creados.

Fue una Audiencia convocada por el OPDS con el claro objeto de mostrar un supuesto apoyo a la obra; para eso se apeló a toda tipo de manipulación, incluso en el orden de los oradores.

El primer elemento, como siempre, es la ampliación de la lista de oradores. Una lista fue la que se entregó al cierre del plazo de inscripción y otra muy diferente la que manejó el responsable de la audiencia, al punto que como el primer día fueron mayoría las intervenciones de quienes se oponían, el segundo día se agregó para el final al menos a 13 oradores que no figuraban en la lista inicial y que defendieron la obra.

Intendente Mario Secco

La “estrella” de la Audiencia fue el intendente Mario Secco, que habló en cinco oportunidades y cerró el encuentro; llegó al extremo (el segundo día) de dejar en su lugar a la diputada provincial Susana González porque él debió retirarse. Queda por saber con qué derecho esta legisladora cerró las deliberaciones del segundo día dedicándose a menospreciar de modo irresponsable a quienes opinamos contra la obra.

Diputada provincial Susana González

Primera conclusión: fue una Audiencia manipulada, donde pareció que la obra era de los municipios y no de interés provincial, porque involucra a todos los bonaerenses de la región. Se ve que en el OPDS no cambió nada.

La obra

Se presentó un solo proyecto ya aprobado y listo para ser ejecutado. Se desconoció el ferrocarril como medio idóneo para el transporte de carga, ejerciendo un efecto coercitivo a favor del uso de los camiones y la creación de caminos, que hizo recordar las épocas de la patria contratista. ‘Cemento y más cemento’, parecía la consigna.

El proyecto es del 2014; el Estudio de Impacto Ambiental tiene 4 años, al menos. Por lo que nada de lo que sucedió en estos tiempos importó. Incluso, leyes, debates y fenómenos naturales que alarman a la población. Ni hablar de la pandemia.

No hubo aportes de parte de la defensa del proyecto, mientras que varios oradores, por el contrario, mostraron que no es la mejor alternativa y quedó claro que su elaboración no fue participativa y que se violó el principio de progresividad.

Se presentó un proyecto viejo e insuficiente, sin tener en cuenta las cuestiones ambientales, sociales y sanitarias, surgidas en el último tiempo. No hay informes físicos y químicos sobre el impacto que se producirían con la remoción de los suelos.

Se dijo que se buscará la menor afectación posible del ambiente siempre y cuando esto no se contraponga con el “progreso”. Cuando la protección del ambiente y el desarrollo del proyecto entren en colisión, no habrá dudas: se priorizará la obra.

Salvo excepciones se apeló a recurrentes fundamentos emocionales como son los accidentes en la Av. Rivadavia, sin explicar cuestiones esenciales como que la obra afecta a una riquísima e irrecuperable biodiversidad de enorme importancia para el ambiente y la salud de los habitantes. A este planteo se respondió con argumentos como que, por cada árbol que se voltee, plantarán 3 ó 5 ó 10 más. Se llegó al absurdo de que un intendente dijera que los vecinos no deben preocuparse porque de ser necesario van a crear un nuevo bosque. El desprecio y desconocimiento de rol de los humedales, por parte de las autoridades rozó con lo inadmisible.

No estaría de más recordar que Ensenada es un polvorín, que tiene un polo petroquímico en las entrañas de la región del Gran La Plata y que pareciera que el objetivo es que el puerto siga creciendo sin tener en cuenta la posibilidad de descentralizarlo. Claro que esto significa inversión, pérdida de ganancias y, en todo este proyecto, el concepto mercantilista es el que prima.

A la falta de información se sumó la malicia de despreciar las contundentes fundamentaciones de los vecinos y organizaciones sociales que fueron, con la mejor intensión, a defender sus derechos y fueron ninguneados por los  funcionarios.

Otra vez se usó el viejo método del OPDS de otorgar la confección del Estudio de Impacto Ambiental a la empresa constructora y que éste sea realizado teniendo en cuenta la obra como un hecho aislado y no vinculado a otras realidades que superan la superficie a impactar.

Se ignoró que algunas de las zonas por donde pasará la autopista tenían protección por ser áreas naturales y que se las modificó recurriendo a conceptos poco democráticos como que los intendentes tienen los votos y representan a la mayoría de la población. Eso no es democracia.

Por último, sin dudas hay que estar alerta ante el intento de insistir en la avanzada de la autopista Perón por el Parque Pereyra. Es que, sin ella, al proyecto regresivo de la ampliación de la autopista Balbín le faltaría una pata.


3 Respuestas a “MANIPULARON UNA AUDIENCIA POR LA AUTOPISTA”

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *